¿Qué tienen en común Chris Hemsworth, Jared Leto y Harry Styles?
Aparte de su fama, los tres han sucumbido a la tendencia que promete arrasar esta primavera: El moño masculino. Ya en 2003 David Bechkam sorprendía luciéndolo durante la recepción de La Orden del Imperio Británico. Todo hubiera quedado en una anécdota si no fuera porque desde el pasado otoño este recogido ha ganado adeptos en todo el mundo. La discreción y la elegancia se dan la mano con un look desenfadado al alcance de hipsters, dandis y bohemios.
Para un hombre con melena, recogerse el pelo en un moño siempre había sido cuestión de comodidad, relegados a los gimnasios y a las labores domésticas, los moños masculinos ven por fin la luz en el glamour de la alfombra roja y las sesiones de fotos.
A pesar de que la popularidad de este peinado se centra actualmente en su aparición en eventos como los Globos de Oro, originalmente se trata de un recogido suelto y desenfadado, más acorde con el estilo hippie o el boho, que inunda los escaparates esta temporada. Pero cuidado con los extremos, estirar demasiado el pelo puedo conllevar desastres irreparables, y llevarlo demasiado suelto puede dar un indeseado look de recién levantado.
Como pista, este tutorial del culturista Brock O’Horn, muy seguido en Instagram.
Inspirado en los peinados de los samuráis del Japón tradicional mezclado con el topknot el “mun” (man + bun “moño de hombre”) debe parte de su popularidad a las redes sociales: Instagram, Tumblr y Facebook se llenan de selfies de seguidores de esta tendencia que estiliza y aporta verticalidad, además de presentarse como una opción más dentro de las posibilidades que ofrece una melena larga o media
Todavía queda por ver si será una tendencia fugaz o si se asentará en la moda urbana.
Elena Sebastián.
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